Es el momento de que pruebes unas vacaciones en un camping

¿Ves cómo llega de lleno el verano y quieres hacer algo diferente? ¿El apartamento de Peñíscola ya se te queda pequeño? Si vienes mucho por este espacio, sabrás que somos muy campo. Respetamos y admiramos a los amantes de las playas masificadas, pero los mantos de estrellas naturales nos gustan demasiado. Así que tenemos un consejo para ti: si buscas algo diferente para escaparte unos días en verano, entonces te tienes que ir de camping. Igual que las vacaciones en un hostel, los campings son territorios maravillosos que debes pisar al menos una vez en la vida.

¿Sobrevivirás en un camping?

Verano campingBueno, eso depende de tus destrezas. Lo esencial es que te hagas a una idea del concepto del camping es totalmente diferente a cualquier otro alojamiento. Si no quieres que el hambre te pille fuera de juego, ya puedes llevar entre tu equipaje algo esencial: un famoso camping gas. Sí, ese utensilio que sabes que existe pero que nunca pensaste que llegarías a comprar. Realmente necesitarás llevarte todo lo necesario para la comida. TODO. Platos, vasos, algo para lavar después… Si llegas al camping y te falta algo, seguro que tus vecinos te pueden prestar algo, pero siempre hay que llevar cada uno lo suyo.

El tema de la comida es muy importante, pero si quieres sobrevivir a tu aventura campestre tienes que hacernos mucho caso con el siguiente asunto: olvídate de las esterillas aislantes y llévate un colchón hinchable. Lo de dormir en el suelo está muy bien como actividad espontánea alternativa, pero cuando llevas un par de días durmiendo así comienzas a odiarlo todo en general. Lo del campo está muy bien, pero no vayamos de supervivientes. La comodidad, ante todo. Seamos serixs.

Sillas y mesas… De camping

Tampoco las olvides. Igual que para dormir, el suelo está muy bien para saludar al sol por las mañanas, pero no es la silla más cómoda del mundo. Cuando te abras una latita de berberechos y te pongas a divagar de la vida con tus acompañantes, agradeceréis estar sentados en unas sillas decentes.

Dos asuntos importantes:

  • Por la noche llega una hora que se apagan las luces. Es ley de camping. La linterna del móvil puede ser totalmente válida, pero si eres una persona romántica de estos asuntos querrás llevar tu linterna de toda la vida. Eso sí, lleva pilas de repuesto. Aunque las puedas comprar en cualquier tienda… (todo puede ser un poco más caro fuera de la gran ciudad)
  • Mientras estés de camping seguro que lavas ropa. Y seguro que tiras del sol para que se seque cuanto antes. Es lo lógico. Pero si vas a necesitar tendedor, lleva tu propia cuerda. La de vecino, una vez más, no vale. No hay nada más fácil en un camping que cruzar una cuerda de árbol a árbol y no tender que invadir las cuerdas de los demás. Y es que en los campings TODO tiene un dueñx.

Paga la electricidad

Si vas de pasada a un camping, con una linterna y una batería externa puede que sobrevivas, pero si vas a pasar varios días -que es lo normal- no te lo pienses dos veces y paga la tarifa para tener conexión eléctrica. Es posible que suene obvio, pero muchxs se sorprenden cuando se dan cuenta de que los enchufes hay que apoquinarlos. No suelen ser caros, y no tiene mucho sentido recortar un gasto así. Sobre todo, cuando no sabemos sobrevivir sin el teléfono cargado.

Y, por último, pero no menos importante, el amigo repelente de insectos. La montaña y el campo son destinos geniales. Pero ni siquiera a los más amantes del terreno les gusta tener las piernas como un rally de mosquitos. Los ‘bichos’ NO van a tener piedad de ti. Todos los campistas son víctimas perfectas. Así que tampoco racanees en repelente, porque igual que todo lo que te hemos recomendado hasta el momento, lo agradecerás.

¿Cuál sería tu consejo estrella para irte de camping este verano?

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